Es el proceso de creación de contenido para medios de comunicación audiovisuales como la televisión, el cine y el internet, que se da con la intención de cubrir necesidades culturales, industriales, comerciales, de entretenimiento, entre otras cosas, y que incluye una mezcla de inversión monetaria, recursos técnicos y un plan bien organizado para que pueda funcionar.

Lo primero que debemos recordar es que, gracias al internet, cualquiera es productor o difusor de videos (bien hechos o no) y que solo con mirar nuestro teléfono tendremos miles de video de redes sociales, plataformas digitales y apps de mensajería instantánea. Entonces, a partir de ahí, este formato ha ganado relevancia en la vida personal pero también en el área comercial para las marcas y empresas que buscan impulsar sus productos o servicios. Así que al combinar el gran poder de atracción que tienen los videos con contenido útil y diferente conseguirás que tus clientes y potenciales clientes se sientan más atraídos por lo que ofreces y largo plazo esto te permitirá:

• Un elevado sentido de pertenencia y lealtad con tu marca
• Mayor confianza por tu producto o servicio
• Tendrás publicidad de boca a boca si ven que tu contenido es de valor
• Y además, un incremento del retorno de inversión, es decir un incremento de lo invertido en el proyecto.

Vayamos a los números para explicar esta parte. Según las estadísticas:

• El 72% de los clientes prefiere conocer un producto o servicio a través de un video y 84% dijo que se han convencido de comprar algo al ver el video de la marca (OPTINMOSTER)
• El 78% de las personas ve videos en línea todas las semanas (SOCIAL MEDIA WEEK)
• Los especialistas en marketing que utilizan videos aumentan sus ingresos un 49% más rápido que los que no lo hacen (WORD STREAM)
• Se esta subiendo ms contenido en video en 30 días que el que ha creado las grandes cadenas televisivas de los Estados Unidos en los últimos 30 años (WORD STREAM)
• En este 2022, el 82% del trafico mundial de internet procede la transmisión y descarga de videos (CISCO)

Podemos decir que la jornada de grabación la dividimos en 3 partes:

• La preparación, donde organizamos el lugar, las personas y las herramientas de trabajo; regulando las luces, montando las cámaras, ajustando el plano y la persona a grabar, y añadiendo los objetos y detalles que sean de interés para el video.
• La grabación, que será el momento en el que se comienza a grabar. Aquí se corregirán movimientos, planos o picos de audio y ruidos que puedan interferir en el resultado. Para ello, se hace el trabajo previo que permite disminuir todas estas variables.
• Y, por último, la comprobación de la jornada para verificar que se ha conseguido el bruto de grabación anhelado, corroborando que todo esté bien, correcto y almacenado.

Por lo general, una jornada de grabación puede durar de 1 a 8 horas, pero todo esto dependerá de la complejidad del proyecto como tal y lo deseado por el cliente, lo cual quedará establecido en una reunión previa que se hace.

El tiempo dependerá de la complejidad del proyecto. Por ejemplo, si se ha acordado un video para redes sociales de 1 minuto de duración, la entrega puede realizarse en 48 horas aproximadamente.

La fecha y hora de entrega se acordará en una reunión previa que se hace con el cliente o a través de WhatsApp.

Después de la primera muestra del material editado, el cliente dispondrá de 2 cambios por proyecto. Si adicionalmente desea hacer más, estos tendrán un costo adicional.

El material audiovisual que entregamos pude ser aprovechado en todas las plataformas digitales que se desee, dispositivos móviles, pantallas, páginas web y medios de comunicación convencionales como el cine o la televisión.

El resultado final de los vídeos se entrega en formato MP4 que es el más común y utilizado actualmente por muchas plataformas o dispositivos. Pero si adicionalmente el cliente lo requiere en algún otro, también lo adaptamos. Y para las fotografías o diseños utilizamos JPG/PNG.

Existen 3 etapas de producción de un video:

• La Preproducción: Que es donde inicia el proyecto, con una reunión entre el equipo que realizará el video y los clientes, para definir qué es lo que se desea grabar, cómo, cuándo y dónde, y en la que se deberá invertir más tiempo y dedicación. Todo esto teniendo como base la realización de un guion, plan de rodaje, locaciones, lista de recursos humanos y tecnológicos que se necesitarán (como, por ejemplo, actores, locutores, vestuario, maquillistas, etc.), y también todos los costos económicos del proceso que incluyen el transporte, los alimentos, el alojamiento, etc.

• Producción: Es la etapa de creación de todas las ideas que el cliente ha solicitado, esto es lo que se conoce como rodaje (jornada de grabación). En ella se graban todas las imágenes, sonidos y locuciones (por parte de un profesional, en caso de ser necesario) para que posteriormente se editen con las últimas tendencias y formatos del momento.

• Postproducción: Aquí, todo el material de grabación es ordenado, cortado, y editado por el equipo creativo y de editores; añadiéndoles efectos, transiciones, elementos 3D, títulos, etc. Además, es la etapa en la que se sonoriza con la música y locución, y se retoca o corrige el color, contraste y brillo hasta conseguir la coherencia y sentido que caracteriza una obra audiovisual profesional.